Robert Howard y el horror racial de la Gente Pequeña
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*El mercado de los goblins*, arte de Hilda Koe
*LA SOMBRA DE MACHEN*
Duendes, elfos, hadas, gnomos, goblins, gremlins, chaneques, aluxes… Muchas
cult...
Hace 1 semana.
6 comentarios:
Enrique: creo tener la suerte de compartir contigo esa incapacidad de aburrirse.
¿Cómo se podría caer en el aburrimiento en este mundo moderno interconectado que pone a nuestro alcance infinidad de noticias provenientes de todo el orbe, documentales de excelente nivel, debates entre los mejores exponentes de ciertos temas, clases magistrales, conferencias imperdibles, cursos completos de las mejores universidades, blogs interesantes (como éste), libros en formato convencional o audible (que pueden ser escuchados gracias a los dispositivos electrónicos miniaturizados en vehículos de transporte o durante una caminata), series de TV y largometrajes, etc.?
No tengo tiempo para aburrirme.
¡Saludos!
Hola, Jack. Y a todo eso que has dicho sobre la infinidad de noticias e información hay que añadir que tu visita alegra mi corazón.
¡salud e inquieta alegría!
Puede tratarse de un estado de ánimo,
Kierkegaard aproxima el aburrimiento a la melancolía. Y lo considera como una de las consecuencias del ejercicio de la vida estética. Uno de los tres primeros niveles o formas en que se puede vivir la existencia humana.
Beso divertdo
Beso apasionado, Lola, al estilo García Lorca:
Serenata
Homenaje a Lope de Vega
Por las orillas del río
se está la noche mojando
y en los pechos de Lolita
se mueren de amor los ramos.
Se mueren de amor los ramos.
La noche canta desnuda
sobre los puentes de marzo.
Lolita lava su cuerpo
con agua salobre y nardos.
Se mueren de amor los ramos.
La noche de anís y plata
relumbra por los tejados.
Plata de arroyos y espejos.
Anís de tus muslos blancos.
Se mueren de amor los ramos.
Que bueno Enrique, no conocía estos versos, gracias.
¡Gracias a ti por ti!
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