miércoles, 22 de julio de 2009

¿Ha dicho razón?

Enrique Arias Valencia

Según los numerólogos, la razón áurea se puede observar sin lugar a dudas en varias estelas babilonias y asirias de cerca de 2000 a. C. No obstante, el astrofísico Mario Livio en su libro La proporción áurea. La historia de Phi, el número más enigmático del mundo nos advierte que no consta en documento histórico alguno que la razón áurea haya sido utilizada deliberadamente por los escultores de las estelas. Livio también indica que al efectuarse la medición de un objeto muy complejo (como puede ser una estela, una pintura, el cuerpo humano) es muy fácil obtener resultados equivocados si se usan sin discreción las magnitudes de las que se parte. Incluso, para que se pudiera suponer que la razón áurea se encuentra en el objeto estudiado, las mediciones han de practicarse comparando puntos indiscutibles del objeto y éste no es el caso de las complicadas mediciones que realizan los numerólogos. Con los argumentos anteriores Mario Livio deduce que es prácticamente imposible que los babilonios utilizasen concientemente la razón áurea. Después, las conclusiones de Livio se hacen extensivas al Partenón, las pirámides de Egipto, el propio cuerpo humano y a la mayoría de las obras de arte que los numerólogos defienden como frutos de la razón áurea.

Mario Livio, geómetra estricto, científico sagaz, arrebató la razón áurea a los numerólogos místicos y quiso reivindicarla para la ciencia. La pregunta es: ¿cuál razón? ¿No es un extravío de la razón el pretender ser la rectora de toda la vida? ¿Se trata de la razón o de un prejuicio que algún hombre pretende pasar por razón?
No podemos ver la belleza, salvo en aquello que hemos depositado nuestros intereses. Yo soy el mercenario de mi causa. Si yo no hubiera leído el libro completo de Mario Livio, no habría podido sonreír con algunos de sus argumentos. Livio alega que quienes ven la proporción áurea hasta en la sopa están viendo de más. Sin embargo, desde mi punto de vista lo que hacen los numerólogos no es ver de más, sino que casi están haciendo ciencia, es una tentativa: la razón en la poesía y la poesía en la razón. Es así que la razón áurea de los numerólogos casi es la razón áurea de los geómetras estrictos.

Hay una parte de mí que le cree a Mario Livio y hay una parte de mí que no le cree. Y una con otra están relacionadas de tal forma que toda la parte es a la mayor como la mayor es a la menor, pero no diré cuál parte de mí es mayor: si la que le cree o la que no le cree. Y no lo diré porque ni yo mismo lo sé. Viven dentro de mí un científico que no sabe contar y un poeta a quien no le importa el anterior.

1 comentario:

Atilio dijo...

"al efectuarse la medición de un objeto muy complejo (como puede ser una estela, una pintura, el cuerpo humano)"
Complejo?
Y que palabra se usa entonces para medir los fluidos, como los océanos que cubren la mayor parte del planeta o los gases gracias a los cuales respiramos y nos desinflamos?

"...las mediciones han de practicarse comparando puntos indiscutibles del objeto".
"Indiscutibles"?


"Mario Livio, geómetra estricto"...
El científico de marras es un gran coleccionista de libros de arte.
Pareciera que "geómetra estricto" sea una de esas etiquetas que los psicoanalistas usaban antes de la ciencia moderna para descalificar a sus contrincantes. El mismo truco que usaron siempre las religiones organizadas y los embaucadores: "miente, miente, que algo quedará" (aunque de ninguna manera te acuso de tales manipulaciones malignas).

"Livio alega que quienes ven la proporción áurea hasta en la sopa están viendo de más".
No es cierto o Livio está errado.
No es cuestión de ver más sino de ver algo. Lo que se ve es la sopa y si se quiere ir mas lejos se puede llamar al auxilio a la química, a la gastronomía o al simbolismo, pero no a la geometría, inclusive un "geómetra estricto" apoyaría tal "vision" de la sopa.
Volvemos al tema del propósito en la naturaleza.